Llevo unos días muy liada preparando lo que va a ser mi lugar de trabajo, pero alguna cosita he ido poniendo en redes sociales.
Los árboles vinieron en furgoneta el 22 de junio, preparé cubetas e hice un puzzle en el espacio disponible, no se movió ninguno. Esa noche la pasaron en el garaje y al día siguiente nada más llegar yo, los saqué al exterior.
Todavía no tenía todos los bloques, coloqué alguno de forma provisional. Teníamos pendiente además pintar la caseta, así que los que iban en ese lado no se podían colocar. La semana pasada los coloqué ya todos, de momento algunos están compartiendo espacio con las plantas que van encima de la estructura redonda, pero todavía no está lista la cubierta.
Me faltan todavía algunos detalles pero ya van estando algunos.
Nada mas entrar he creado este conjunto con algunas de las macetas de Paco Ojeda.
Y nada más entrar un bosque de bambú gracias a mi vecina. Ya he empezado a controlarle la altura.
Me quedan cosas, terminar la caseta que ya estamos con ella, encontrar una linterna, poner el estanque, pero ya he empezado a recibir visitas, los primeros, los vecinos que tenían mucha curiosidad por ver que era lo que estaba tramando y en algunos he despertado el gusanillo del bonsái.
Mientras sigo disfrutando con mis árboles.
En el lado de la pared he puesto la zona de proyectos y recién trasplantados.
Nada mas entrar he creado este conjunto con algunas de las macetas de Paco Ojeda.
También he puesto algunas macetitas de las más peques en el mueble de José.
Para algunos shohines he creado una colocación diferente.
Más fotos, pero no todas, no lo voy a poner entero.
La pregunta que más me han hecho algunos amigos: ¿han notado los árboles el cambio? Pues algunos están tirando como locos, otros se han parado, y alguno ha empezado a otoñar.
Mientras sigo disfrutando con mis árboles.
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