Yo, no he tenido tiempo

jueves, diciembre 10, 2020

 

Desde el anterior Congreso ABE tenía pensado presentar dos composiciones para ver si pasaban el corte y estaban presentes en la edición que se hubiera celebrado hace unos días. Había pensado en todo, las macetas, las mesas, las plantas de acompañamiento. Decidí usar el factor sorpresa, no pondría a los elegidos en el blog al menos durante una larga temporada. Era cuestión de tiempo.

En enero sufrí una caída y mi hombro, todavía recuperándose de una fuerte tendinitis se resintió. Eso supuso un retraso en mis planes, uno de los árboles no pude trasplantarlo, pero ya encontraría solución hasta marzo podía posponer el trasplante. Era cuestión de tiempo.

En marzo llegó el confinamiento, que no me pilló por sorpresa, aficionada como soy a los datos, veía desde febrero que el tema pintaba mal. Había empezado a teletrabajar y eso suponía para mí más horas. Cuando no estaba conectada estaba preparando lo que iba utilizar. Preparar el Congreso, atender a los socios. Más horas. A mi madre había que conseguir que le diera el aire, así que decidimos que pasara tiempo en la terraza, ella ha disfrutado de mis árboles, de las brotaciones, de las flores y de los frutos más que yo. La mayoría de los días me limitaba a salir a regar mientras ella estaba desayunando. Cuando conseguía algo de tiempo, tenía que pensar bien con que árbol me ponía. Era cuestión de tiempo.

Prácticamente reduje al mínimo mi participación en las redes sociales y empecé a publicar menos, necesitaba ese tiempo para la familia, sobre todo mi madre, trabajo, mis árboles, ABE, por ese orden de prioridad. Lo poco que entraba veía a mis amigos preparando sus árboles, “ahora tenemos tiempo, no hay excusas”, es algo que he leído un montón de veces desde marzo y yo pensaba que donde estaba todo ese tiempo que tenían ellos.

“Delegar, tienes que delegar”, me dijeron, y decidí empezar a delegar trabajos en otros, resultado, las cosas nunca estaban en fecha o no estaban bien. La respuesta más oída era “uff, no sé si voy a poder, no tengo tiempo”. Y menos mal que José María siempre está dispuesto, sin él no sé qué hubiera hecho.

Habíamos preparado un Congreso que prometía ser espectacular, los puestos del mercadillo se agotaron en apenas 10 días, había un set de regalos para los socios, camiseta, mascarilla calendario y más cosas que ponían los patrocinadores. Todo estaba casi listo, más de 500 unidades de cada regalo no se improvisan, así que cuando en septiembre se anunció el cambio de fecha del Congreso, en el mismo mail se pedía a los socios que nos enviaran un mail con su talla de camiseta para proceder al envío del pack que era cosa de ABE, enviar todo no podía ser difícil… ¿o sí?

Esto me ha servido para darme cuenta de que los socios, al menos una inmensa mayoría, no lee los mails. Como delegada de la zona que me corresponde pedí a la mayoría de los socios que me dijeran su talla, quedaban algunos que no contestaron al mail ni a mi mensaje. Un mes después del mail, en octubre se envió la primera remesa, ese es otro tema, tuve que pensar a quien encargárselo y que lo hiciera, así que lo tuve claro, la delegación valenciana responde siempre que se les pide algo, Alberto Gimeno y José Antonio Calderón no me defraudaron y estuvieron dispuestos a dedicar parte de su tiempo libre a organizar los envíos. Se harían en varias fases, según Correos, mejor si los llevábamos en remesas de al menos 100 paquetes, pensé “vale en unas semanas todos enviados”. Era cuestión de tiempo.

Al empezar a ver las fotos de los socios con las camisetas, fueron muchos los que reclamaban su paquete, a todos se les decía lo mismo, escribe al mail diciendo tu talla, y escribían, sí pero no para decir “no lo he leído” sino  que decían “no me lo habéis enviado” así que como no me gustan esas tonterías, a cada uno le demostré que sí se había enviado a su dirección de correo. Algunos paquetes han llegado de vuelta, son varios los que han cambiado de dirección y no han avisado, o te escriben desde otro mail porque no usan el que aparece en su inscripción. Pero luego reclaman que todavía no les ha llegado el segundo sin preguntar si eso tiene un coste adicional. Otros dicen su talla en noviembre, les dices que esperen que esto se hace en ratos libres y te meten prisa. ¿Prisa? ¿Tienes prisa por recibir tu paquete? Pues haber enviado la talla cuando se te pidió. Por no hablar de la hora en la que recibo los mails. No son uno ni dos, son muchos los que escriben a partir de las 23:00 hasta las 08:00, vamos a ver, ¿durante el día no has sacado tiempo? Ha habido días que antes de contestar he tenido que respirar hondo, muy hondo. El tiempo extra que tenía que dedicar a estas cosas lo he quitado de las dos únicas partes que podía, del que dedico a mi familia, sin restárselo a mi madre, y del que dedico a mis árboles. Muchas noches antes de irme a dormir, la pregunta de mi marido era “pero, ¿ a estas horas qué haces? Y la respuesta era siempre la misma “contestar a un socio”. Y la historia se repetía al levantarme, lo primero ponerme con los mails que habían llegado durante la noche, pensé que era algo temporal. Cuestión de tiempo.

Viendo que pasaban las semanas y no llegaban más tallas, decidí pedirles a los delegados de cada zona que contactaran con sus socios y les dijeran que enviaran el mail, quería tener todos enviados para antes de terminar noviembre, tampoco funcionó, me llegaron tallas de la Comunidad Valenciana, de Madrid, de Cataluña, algunas de Galicia, y Castilla-León, pero quedaban muchos socios por contestar.  Así que decidí que se hacia el ultimo envío con las notificadas y los que no habían dicho nada se enviaba una talla al azar, dos meses habían pasado desde que se envió el primer mail, y todavía había unos 100 socios que no habían contestado, incontables las horas que he pasado con el tema, anotando tallas, contestando mails, generando etiquetas, el trabajo de Alberto y José Antonio haciendo paquetes ha sido impagable. Cuestión de tiempo.

Desde el principio de Abe, me he hecho cargo de las relaciones con los socios, inscribirlos, darles la bienvenida resolver sus dudas, pero todo esto me ha dejado muy, muy cansada. He estado varias veces a punto de decir “se acabó, hasta aquí he llegado” pero entonces un día me dicen que si no estoy contenta con lo que me ha dedicado David Benavente, y sin saber de qué me hablaban entro en Facebook y me encuentro un video precioso, diciendo unas cosas muy bonitas aunque no se si se puede decir que sean ciertas ni merecidas, pero  te sube la moral. Y no ha sido el único, Juan Liñares, lo ha hecho en dos ocasiones, una con los Haikus del Capitán y otra al recibir su paquete o Gabriel Corral, que por privado también me hizo llegar unas bonitas palabras. Es agradable saber que me quieren. Por supuesto, no me puedo olvidar de José María, el único que me ha preguntado si me podía echar una mano, el único que se preocupó por los signos de cansancio que apreció en mi cara en una de mis publicaciones, me distraigo mucho con sus publicaciones de arte  y estoy deseando poder visitar un par de exposiciones que tengo pendientes en su compañía. Esto también es cuestión de tiempo.

El jueves pasado me puse a pensar que yo estaría ese día ya en Fuenlabrada preocupándome para que todo saliera perfecto, y hubo un momento en que pensé mejor que no haya congreso, porque quizás no me hubiera contenido y a alguno le hubiera dicho cuatro cosas. Y lo más gracioso de todo: no hubieran estado mis árboles porque yo… No he tenido tiempo.

 

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3 comentarios

  1. Bienvenida al club Loli, los socios son el baluarte de cualquier asociación pero además de recibir también deben dar y eso no siempre pasa, ni tampoco es muy reconocido el trabajo que no se ve.

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  2. Pufff. No te voy a decir que no sé hasta donde llega tu dedicación. Lo que no se es como te da el tiempo para hacer todo lo que haces. Y a todos nosotros, nos falta mucha empatía. Total,como ya hay alguien que lo hace. Muchas gracias por todo. Ánimo y aunque tarde, cuenta conmigo. Un fuerte abrazo.

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  3. Muchas lo he comentado a más de uno, no sabéis lo que tenéis, tú trabajo es impagable y el del equipo igual. Si no se tiene una pasión tan grande por algo no se haría algo así ni por dinero. Ya no te digo gratis. Gracias Loli y gracias a todos los que hacéis posible ABE. 🙏🏻🙏🏻🙏🏻

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